La Primera División de Argentina es el torneo de la primera categoría del fútbol masculino argentino, organizado desde 1893 por la Asociación del Fútbol Argentino, excepto entre las temporadas 2017-18 y 2019-20, cuando fue regido por la Superliga Argentina. Disuelta esta, la Asociación creó el órgano interno denominado Liga Profesional de Fútbol Argentino, a través del cual retomó su conducción. Es el máximo escalón del sistema de competiciones del fútbol masculino en el país.

En el campeonato 2023, el tercero a cargo de la Liga Profesional, participaron veintiocho equipos, al igual que en el torneo del año anterior. El torneo se disputa con el formato de una sola rueda de veintisiete fechas, en la que se enfrentan todos contra todos. Consagra un campeón y suma para los descensos que se producen al final de la temporada anual, que incluye esta competición y la Copa de la Liga.

El campeonato de Primera División es uno de los mejores del mundo de acuerdo con la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol. En la última clasificación publicada, de 2022, ocupa el noveno puesto en el ranking anual,[6]​ que se elabora desde 1991. La Primera División de Argentina, a excepción de 1993, siempre estuvo entre las diez primeras. Su mejor ubicación en este ranking se dio en 2008, cuando logró el tercer lugar, siendo superada sólo por la Premier League de Inglaterra y por la Serie A de Italia.[7]

Desde 1893, se ha disputado en forma ininterrumpida, y es la única que ha permanecido durante 131 años sin intervalos.[nota 4]​ Esto, sumado a que hubo tres temporadas de seis meses y a que en varios ciclos se han otorgado dos títulos por período e incluso tres en 1936 y en 2012-13, con 192 ediciones (54 en el amateurismo y 138 en el profesionalismo), es la liga que más campeones consagró en la historia del fútbol mundial.

History

Alumni ganó diez campeonatos de Primera División en la era amateur, incluyendo el de su predecesor: Buenos Aires English High School Athletic Club.
Medallas obtenidas por el equipo de St. Andrew's, en 1891, luego de vencer a Old Caledonians.

La Primera División de Argentina reconoce dos etapas diferenciadas, conocidas respectivamente como era amateur o amateurismo y era profesional o profesionalismo. La primera etapa transcurrió desde 1891 a 1934, entre la fundación de la primera liga, llamada Argentine Association Football League, hasta la fusión de la Asociación Argentina de Football (Amateurs y Profesionales), nombre que había tomado la entidad oficial afiliada a FIFA, con la disidente Liga Argentina de Football, que ya había organizado previamente cuatro campeonatos, que dieron origen a la actividad profesional regularizada, a partir de 1931 en adelante.

De esa forma, los últimos cuatro torneos de la era amateur se superpusieron con los cuatro primeros del profesionalismo, en lo que fue una continuidad histórica, marcada por el blanqueo de la profesionalidad que exigía la práctica del deporte en su más alto nivel. No obstante ello, la Asociación reconoce una desigualdad de carácter organizativo entre las dos etapas, por lo que las diferencia en cuanto a su significación histórica y no las unifica, aunque reconoce la validez de los logros de los clubes en la etapa amateur.​

Era amateur

El primer partido de fútbol jugado en Argentina se disputó el 20 de junio de 1867, en el Buenos Aires Cricket Club, limitándose su práctica durante un tiempo a los colegios ingleses. A partir del impulso dado por Alexander Watson Hutton, inmigrante escocés llegado en 1882, considerado el padre del fútbol argentino, la actividad comenzó a expandirse. Fue así que la primera Argentine Association Football League se organizó en 1891, pero se disolvió al finalizar el año. Tras un paréntesis en 1892, el 21 de febrero de 1893 se fundó la definitiva Argentine Association Football League, presidida por el citado Alexander Watson Hutton. Ese mismo año organizó la disputa de un torneo en un marco que perdura desde entonces, siendo la segunda liga más antigua del mundo, fuera de las islas británicas, luego de los Países Bajos (1888), y precediendo a Bélgica (1895), Italia (1898) y Alemania (1903).

Esta entidad reconocida por la FIFA desde su afiliación en 1912, fue renombrada en febrero de 1903 como Argentine Football Association, en febrero de 1912 como Asociación Argentina de Football, en noviembre de 1926 como Asociación Amateurs Argentina de Football, y en junio de 1931 como Asociación Argentina de Football (Amateurs y Profesionales). En noviembre de 1934, se fusionó con la disidente Liga Argentina de Football, constituyéndose la Asociación del Football Argentino, denominación que se castellanizó en 1946 para adoptar el nombre definitivo de Asociación del Fútbol Argentino. Además hubo tres asociaciones disidentes: la Federación Argentina de Football (1912-1914), la Asociación Amateurs de Football (1919-1926), y la mencionada Liga Argentina de Football (1931-1934). Cabe aclarar que estas entidades son también predecesoras de la Asociación del Fútbol Argentino.​

Boca Juniors, con sus cuatro títulos de 1919 (de izq a der): Copa de Competencia Jockey Club, Copa Campeonato, Cup Tie Competition y Copa Ibarguren.

Aquel primer torneo de 1891 fue compartido. Luego de la disputa de las 8 fechas, Saint Andrew's y Old Caledonians terminaron en la primera posición con 13 puntos. La Asociación consagró como campeones a ambos equipos, pero los obligó a disputar un cotejo para determinar quién se llevaba las medallas conmemorativas, ya que había un solo juego.​ Dicho partido fue ganado por Saint Andrew's, es por ello que algunos, incluida la propia AFA, dan a este como único campeón del primer torneo del fútbol argentino.

Racing Club, heptacampeón de Primera en la década de 1910: récord aún vigente.

En los primeros años la liga estuvo dominada por equipos y jugadores británicos, con mayoría de los escoceses. Este predominio continuó durante los años siguientes y declinó en la década de 1910, a partir de que la población criolla adoptó y dominó el juego. El Alumni, multicampeón de los primeros años del siglo XX se disolvió tras ganar el torneo de 1911, poniéndole fin al dominio británico del fútbol argentino, sin embargo muchos futbolistas de ese origen jugaron en Argentina hasta 1920 y muchos de sus descendientes también tuvieron oportunidad de disputar encuentros de la máxima categoría del fútbol argentino.

Huracán logró cuatro campeonatos en la década de 1920: su mejor serie.

El fin de la era amateur comenzó en 1931 con el advenimiento del profesionalismo a partir de la conformación de la Liga Argentina de Football, asociación disidente de la FIFA formada por los principales equipos, que organizó los primeros torneos profesionales. No obstante, la Asociación Argentina de Football (Amateurs y Profesionales) siguió disputando sus propios certámenes hasta 1934, año en que se fusionó con la Liga Argentina, para constituir la Asociación del Football Argentino, entidad única que pasó a regir la actividad a partir del Campeonato de Primera División de 1935.

Hacia su fin muchos de los mejores jugadores como Luis Monti, Renato Cesarini y Raimundo Orsi emigraron para jugar en las ligas profesionales de Europa, especialmente Italia.

Durante este período y hasta 1938, ya entrado el profesionalismo, en el campeonato de Primera División participaron exclusivamente clubes de la ciudad de Buenos Aires, el conurbano bonaerense y la ciudad de La Plata, con la excepción de Rosario Athletic Club en 1894, Lobos Athletic Club, en 1894, 1898 y 1899, y Reformer, de la localidad de Campana, entre 1905 y 1909. Esto ocurría porque la Asociación del Fútbol Argentino (y sus predecesoras), más allá de ser la entidad madre del deporte, organizó originalmente sus torneos en dicha zona metropolitana y los equipos del interior del país no estaban —y aún no están— afiliados de manera directa a esta, por lo que competían únicamente en los campeonatos organizados por las respectivas ligas regionales.

Si bien los equipos rosarinos competían en las copas nacionales que organizaron la Asociación Argentina y las disidentes Federación Argentina y Asociación Amateurs, lo hacían como invitados y no participaban del torneo oficial regular de Primera División.

Era profesional

Formación de Independiente cuando obtuvo el Campeonato de 1948.
Logo de la Primera División Argentina de Fútbol.

A fines de los años 1920 la situación que vivían los torneos había desbordado a sus organizadores. Entre otros hechos la participación de hasta 36 equipos, hacía que los certámenes siguieran durante la época estival y concluyeran entrado el año siguiente, con el consecuente desinterés de los aficionados.

El 10 de abril de 1931 los futbolistas decidieron comenzar una huelga con el fin de que se reconociera su condición de profesionales y se regularizaran los intercambios de jugadores entre equipos. Querían conseguir la libertad de contratación, ya que había un pacto entre los clubes para no fichar un futbolista sin consentimiento del club de origen, y blanquear su situación, ya que si bien muchos cobraban por jugar, no había reglas claras.

Se decidió entonces realizar una reunión entre todos los clubes existentes en la Asociación Amateurs Argentina de Football, para encontrar una solución. El representante de Racing Club propuso crear una rama profesional con los equipos de mayor convocatoria de Buenos Aires, su conurbano, La Plata y Rosario. Muchos no aceptaron la propuesta, ya que consideraron que la solución al conflicto debería ser para todos y no solo para un sector. Esto trajo como consecuencia una fractura, producida el 18 de mayo de 1931: 18 clubes, entre ellos los de mayor convocatoria, decidieron retirarse de esa Asociación, que era la entidad oficial. Atlanta, Argentinos Juniors, Boca Juniors, Chacarita Juniors, Estudiantes de La Plata, Ferro Carril Oeste, Gimnasia y Esgrima La Plata, Huracán, Independiente, Lanús, Platense, Quilmes, Racing Club, River Plate, San Lorenzo de Almagro, Talleres, Tigre y Vélez Sarsfield formaron la Liga Argentina de Football, blanqueando el profesionalismo. La otra entidad tomó el nombre de Asociación Argentina de Football (Amateurs y Profesionales), hasta que el 3 de noviembre de 1934 se fusionaron y dieron lugar a la creación de la Asociación del Football Argentino.

Con la creación de la liga profesional, los clubes del interior del país comenzaron a desear competir ellos también en el campeonato más importante, por lo cual comenzaron a afiliarse a la AFA, aunque se admitieron solamente equipos del interior de la Provincia de Buenos Aires y de las ciudades de Rosario y Santa Fe, de la misma provincia, durante las décadas de 1930, 1940 y 1950, pero que no llegó a generalizarse a todo el país. Así, en 1939, Rosario Central y Newell's Old Boys, solicitaron a la Asociación del Fútbol Argentino su incorporación al campeonato regular. La AFA, luego de intensas reuniones y deliberaciones, decidió otorgarles el permiso mediante el cual ambos clubes lograron formar parte del campeonato de ese año. Posteriormente, se permitió que Unión de Santa Fe participara de la Segunda División en 1940, llegando a la máxima categoría en 1967; Central Córdoba de Rosario se afilió en 1943 a Primera B, y logró el ascenso a Primera en 1958; Colón de Santa Fe se incorporó en 1948 -para disputar la Segunda División- y llegó a Primera en 1966; y Sarmiento de la ciudad de Junín fue admitido en 1952 en Primera B, y accedió a la división de elite en 1981.

La Máquina fue una de las grandes delanteras que dio el fútbol argentino.

Hasta 1966, el campeonato se disputó -excepto en 1934 y 1936- a dos vueltas en forma anual, en un año calendario. En dicho año el interventor de AFA, Valentín Suárez, determinó un cambio en la organización de los torneos, que estaba destinado a permitir que los equipos del interior del país compitieran en un campeonato de primera federal. El campeonato regular, a partir de allí denominado Metropolitano, fue listado al mismo nivel que los organizados por las asociaciones y ligas del resto del país, disputándose en la primera parte del año y clasificando equipos, al igual que los demás campeonatos, al Nacional, estructurado por puntos a una sola rueda, en sus primeras 3 ediciones, y luego como una copa, con grupos e instancias finales.

A partir de entonces, el fútbol se revolucionó, saliendo de cierta apatía que tenía en años anteriores. El cambio se evidenció en que equipos no acostumbrados al éxito desde el inicio del profesionalismo pudieron salir campeones: Estudiantes de La Plata en 1967, Vélez Sarsfield en 1968, Chacarita Juniors en 1969 y Huracán en 1973, a diferencia del período anterior en que sólo habían logrado consagrarse cinco equipos: Boca Juniors, Independiente, Racing Club, River Plate y San Lorenzo. Otro hito fue que equipos del interior lograran el campeonato: Rosario Central en 1971 y 1973, y Newell's Old Boys en 1974.

Vélez Sarsfield, campeón del Torneo Nacional 1968.

En 1980, el Torneo Metropolitano pasó a llamarse Campeonato de Primera División, aunque extraoficialmente se siguió nombrando como tal. Además a dicho certamen, se incorporó Talleres de la ciudad de Córdoba, en virtud a la Resolución 1309, promulgada el 15 de agosto de 1979.​ La misma establecía, de manera retroactiva, que los clubes indirectamente afiliados a la AFA que clasificaran o hubieran clasificado a la ronda final en dos de tres disputas consecutivas del Torneo Nacional, adquirirían el derecho a participar en el certamen regular. Gracias a dicha norma otros dos equipos de la mencionada ciudad fueron admitidos: Instituto en 1981 y Racing en 1982. En este último año, además, se cambió el orden de los campeonatos, pasando el Nacional a jugarse en el primer semestre y el Metropolitano, al final del año.

Por consejo del entonces director técnico de la Selección Nacional, Carlos Salvador Bilardo,[cita requerida] en 1985, tras la disputa del Nacional, la estructura cambió, se eliminó dicho certamen y se volvió al torneo anual único, desde la temporada 1985-86, pero esta vez en correspondencia con el calendario europeo; es decir, en dos semestres de años sucesivos. Para mantener la posibilidad de acceder a la máxima categoría a los equipos del interior, no afiliados directamente a la Asociación del Fútbol Argentino, se los incluyó en el sistema de ascensos y descensos, al crear el Nacional B como nueva segunda división.

A pesar de que la estructura permitió una participación cada vez mayor de equipos del interior del país (aún de ciudades medianas o pequeñas como Tres Arroyos o Rafaela), ningún equipo fuera del eje Buenos Aires-Rosario-La Plata ha logrado salir campeón.

En el ciclo 1990-91 las dos ruedas del certamen pasaron a ser torneos independientes, llamados respectivamente Apertura y Clausura, los cuales clasificaron dos ganadores que se enfrentaron en una final a dos partidos, alternando la localía, para determinar un único campeón. A partir del campeonato 1991-92, la final fue eliminada y cada torneo consagró al propio.

Rosario Central, campeón del Torneo Nacional 1971: primer club del interior del país en lograr una liga de Primera División.

En el campeonato 2012-13, se disputó una final, a un único partido y en cancha neutral, entre los campeones de ambas ruedas, renombradas Torneo Inicial y Torneo Final, la que consagró al campeón del campeonato, otorgándose entonces tres títulos en la temporada. Consecuentemente, en julio de 2013, la AFA reconoció la validez, como conquista oficial, de las tres copas puestas en juego en el año 1936, convirtiéndolo, retroactivamente, en el único antecedente histórico de este sistema de disputa.​ En la temporada 2013-14, se disputó dicha final entre los campeones de ambos torneos, pero por el trofeo Copa Campeonato de Primera División.

En el segundo cuatrimestre de 2014 se inició una reforma, destinada, en principio, a recuperar los torneos jugados en un año calendario, pero con la inclusión de un mayor número de equipos. Por ese motivo se disputó un torneo de transición, a una sola rueda y sin descensos.

El equipo de San Lorenzo campeón del Torneo Metropolitano 1968: Los Matadores.

No obstante, a pesar de haberse decidido oficialmente que, a partir del Campeonato 2015, se cambiaría el modelo de dos torneos cortos, utilizando calendario europeo, a un solo concurso que transcurriría en el año calendario, aumentando el número de participantes a 30 equipos, en su reunión del 11 de noviembre de 2014, el Comité Ejecutivo de la Asociación propuso una revisión de lo actuado. Por ese motivo se produjo una controversia sobre el modo de disputa y el calendario de ese certamen,​​ aunque finalmente, ante la intervención de directivos de la televisión y el gobierno, se propuso respetar lo acordado en la reunión del 3 de junio de 2014 y ratificar el modo de disputa del torneo.​ El concurso se realizó en una ronda de todos contra todos, con el agregado de un partido según los emparejamientos de los equipos realizados por la Asociación, basado, en la mayoría de los casos, en las rivalidades clásicas.

Posteriormente, en un nuevo cambio de rumbo, el Comité Ejecutivo de la Asociación decidió acoplar nuevamente las competiciones oficiales del fútbol argentino al calendario del hemisferio norte, con el fin de que queden coordinados los mercados de pases, además de acordarse que en las futuras temporadas se disminuya progresivamente la cantidad de participantes.​ Para ello, en la primera parte del año 2016 se realizó un nuevo torneo de transición, con un formato de contingencia. Los 30 equipos participantes fueron divididos en dos zonas de 15 cada una, cada uno jugó un total de 16 partidos, 14 por el sistema de todos contra todos, dentro de cada zona, más dos interzonales, partido y revancha, que disputaron los equipos agrupados por parejas, ya que cada uno integró una zona distinta. Se produjo un descenso a la segunda división por el sistema de promedios —tomando en cuenta las campañas de las últimas cuatro temporadas— y ascendió un solo equipo de la Primera B Nacional.​

Logo antiguo de la Primera División del fútbol argentino.

En el segundo semestre de 2016 comenzó un campeonato largo similar al torneo 2015, con la diferencia que se jugó con el calendario europeo y, para ir reduciendo el número de equipos, hubo cuatro descensos y ascendieron solamente dos equipos de la Primera B Nacional. A partir de allí, se volvió a la disputa de concursos anuales, desarrollados entre el último semestre de un año y el primero del siguiente. No obstante, en la temporada 2017-18, disputada por 28 equipos, se suprimió la revancha de los «clásicos» y se mantuvo la reducción de participantes, con cuatro descensos y dos ascensos. El torneo 2018-19 se jugó sin cambios, por primera vez en mucho tiempo, con 26 equipos.

La temporada 2019-2020 la jugaron 24 equipos. A los fines de establecer los descensos, que se redujeron a tres, y la clasificación a las copas continentales, se habían agregado al torneo regular los once partidos que disputarían los equipos por la ronda clasificatoria de la Copa de la Superliga 2020, pero este proceso se vio abortado por la cancelación de ese certamen debido a la pandemia de covid-19, lo que dio lugar a una nueva reestructuración. Al mismo tiempo que se consumó la disolución de la Superliga Argentina, se decidió que el torneo volviera a la órbita de la Asociación y se creó por asamblea realizada en mayo de 2020 el órgano interno llamado Liga Profesional. Se suprimieron los descensos y quedó pendiente la clasificación de un equipo a la Copa Libertadores, que se realizó luego a través de la Copa Diego Maradona, primer certamen organizado por el flamante estamento, en el segundo semestre del año. Al mismo tiempo, se decidió volver a la disputa del campeonato regular en el año calendario, a partir de la temporada 2021.


La Superliga Argentina es un torneo de fútbol profesional que se lleva a cabo en Argentina. Es considerada una de las ligas más importantes de América Latina y cuenta con la participación de los mejores equipos del país.

La competencia se desarrolla a lo largo de una temporada, en la cual los equipos se enfrentan en partidos de ida y vuelta. Al final de la temporada, el equipo que acumule la mayor cantidad de puntos se consagra campeón de la Superliga.

Los partidos se disputan en diferentes estadios de todo el país, brindando la oportunidad a los aficionados de presenciar los encuentros en vivo. Además, los partidos son transmitidos por televisión, permitiendo que los seguidores del fútbol argentino puedan disfrutar de la emoción desde la comodidad de sus hogares.

La Superliga Argentina es reconocida por su nivel de competitividad y por la calidad de juego que ofrecen los equipos participantes. Los jugadores más destacados del país forman parte de los diferentes clubes, lo que garantiza un espectáculo de alto nivel.

Este torneo no solo es importante a nivel nacional, sino que también tiene repercusión a nivel internacional. Los equipos argentinos que se destacan en la Superliga suelen participar en competiciones continentales, como la Copa Libertadores, representando al país y buscando alcanzar la gloria a nivel sudamericano.

En resumen, la Superliga Argentina es un torneo de fútbol apasionante que reúne a los mejores equipos del país. Con su nivel de competitividad y calidad de juego, brinda emociones y espectáculo a los aficionados tanto en los estadios como a través de las pantallas de televisión.